jueves, 8 de marzo de 2012

Ex Gabrielinos

ALFREDO BAQUERIZO MORENO


PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA.- Nació en Guayaquil el 28 de Septiembre de 1.859. Hijo legítimo de José María Baquerizo Noboa, Ministro de Hacienda de García Moreno en su segundo período y de Rosario Moreno Ferruzola, dueña de la finca "Los Morenos" en Balao y prima hermana de ese Jefe de Estado, ambos guayaquileños.
Estudió las primeras letras con su madre, "A ella debo mi educación en la niñez y mis estudios en la juventud" y la secundaria en el San Vicente del Guayas y en el San Gabriel de Quito dirigido por los jesuitas, quienes le enseñaron a hablar lenguas extranjeras y el latín. "Por eso conocía de Literatura y leía a los clásicos -sobre todo a Virgilio y a Horacio- cuyas principales obras tradujo al Castellano y a quienes debía en gran parte la savia vivificadora de su natural buen gusto y delicada sensibilidad.
Desde joven fue un brillante pianista capaz de interpretar las más difíciles partituras y hasta llegó a componer numerosas piezas musicales, por eso Pablo Haníbal Vela diría //El de los dedos ágiles/ de magia y de virtud/ que al piano hablar hicieron / lo que él quiso decir.// En 1.872 había sido alumno de Ginno Rossi, profesor italiano del recién fundado Conservatorio Nacional de Música, en técnica y ejecución al piano. Poco después falleció su padre de un violento infarto y mientras se encontraba en el despacho Ministerial de Quito, pues le hallaron muerto con la cabeza sobre el escritorio. Entonces entró la pobreza en su casa.
En 1.877 ingresó a la Universidad Central y desde la capital enviaba colaboraciones a las Páginas Literarias del Diario la Nación de Guayaquil. Estudiante de Derecho y poeta lírico y becqueriano, talento claro, temperamento suave y rumoroso, músico y polígloto, solía frecuentar los salones del Palacio Presidencial y fue amigo personal del Presidente Ignacio de Veintemilla y de su guapísima sobrina Marietta, alma de esas reuniones artísticas y literarias en las que se representaban obras de teatro especialmente escritas para Marieta, se cantaba arias líricas al son de exquisitas voces femeninas y se hablaba de arte recordando a Paris.
Con el profesor colombiano José María Velasco y Castillo escribió varios sonetos y silvas que reunieron en 1.881 en Quito en un poemario dividido en dos partes, la primera tituló "Lágrimas" y es de Velasco y la segunda "Rumores del Guayas" de Baquerizo, ambas con Prólogo de Quintiliano Sánchez. También fue de esa época su comedia "El Nuevo Paraíso".
En 1.882 salió en Guayaquil "Ensayos Poéticos" en 102 págs. escrito con sus amigos Nicolás Augusto González Tola y Juan Illingworth Ycaza y con González publicó a medias el drama histórico "Amor y Patria". Era uno de los jóvenes de más avanzadas ideas en el Ecuador pero no se comprometió en la lucha armada contra la dictadura por ser de apacible naturalidad.
En 1.883 obtuvo Medalla de Primera Clase en la Universidad Central y el 11 de Marzo de 1.884 se graduó de Abogado y viajó a Guayaquil a ocupar la secretaria de la Corte Superior de Justicia hasta el 86. Ese año contrajo Matrimonio con Piedad Roca Marcos, tuvieron doce hijos y una vida dichosa.
En 1.885 fue profesor del Colegio San Vicente. El 87 Juez Consular de Comercio. El 88 colaboró en el periódico capitalino "El Cometa" con Atanasio Zaldumbide y Antonio Alomía Llori e instaló su estudio profesional con su primo Carlos Carbo Viteri, enviando colaboraciones al diario de la tarde "La Opinión Publica".
En 1.890 ocupó la Dirección de la Biblioteca Municipal aunque por corto periodo. Casi enseguida fue Alcalde Municipal, hoy seria Juez de lo Civil, hasta 1.896.
En 1.891 fue Miembro de la Junta de Sanidad y Sindico de la Municipalidad hasta el 96. El 93 publicó en el "Álbum Ecuatoriano" de Quito, revista fundada por Miguel Ángel Corral y Luis Napoleón Dillon, su "Sonata en Prosa" y "El Instituto Libre", primera de sus producciones en prosa, y en "El Globo de Guayaquil" su novela "Titania" con los amores de una muchacha de ese nombre, reeditada el 95 en "La Revista de Guayaquil”. También se conoce otra edición que incluye a "El Señor Penco" en 263 págs. ambas producciones se mueven en un ambiente criollo y el estilo es naturalista.
En 1.894 comenzó a colaborar en la revista semanal de Literatura, Ciencias y Artes "Guayaquil" cuyo director era el Dr. Cesáreo Carrera Padrón, ingresó al cuerpo de profesores de la Universidad de Guayaquil y fue electo Ministro Juez de la Corte Superior, ocupando la presidencia de dicho organismo el 99.
En 1.896 sufrió la pérdida de su casa en las Peñas y de todas sus pertenencias durante el llamado Incendio Grande y para reconstruirla se asoció con otros perjudicados y trajeron de California un cargamento de madera de pino de tea aceitosa, a la que no entraba polilla.
En 1.901 publicó en el "Globo Literario" de Guayaquil "El Señor Penco" en 203 págs. “Titania" y "Luz" en un solo volumen de 159 págs. y "Una Sonata en prosa" en 128 págs. con situaciones tomadas de la vida de la clase media guayaquileña, delicadas sátiras y hasta juguetonas y superficiales, porque no describen la naturaleza del medio geográfico ni se adentran en el alma de sus personajes. Novelas urbanas más para divertir que para recordar, quizá por eso mismo la conservadora Academia Ecuatoriana de la Lengua le designó su Miembro de Numero. Ese año contrajo matrimonio su hijo mayor Alfredo Baquerizo Roca con Dolores Valenzuela Plaza, sobrina carnal del General Leónidas Plaza, que ocupó la Presidencia de la República.
En 1.902 fue llamado a Quito para ocupar el Ministerio de Relaciones Exteriores en un momento álgido con la Santa Sede y escribió una síntesis del problema, publicada bajo el titulo de "Memorias de Negocios Eclesiásticos."
En 1.903 fue designado Ministro Plenipotenciario en Cuba y en Colom¬bia y Vicepresidente de la República para el cuatrenio del 3 al 7. Todo le ayudaba, tenia buena presencia, era alto y erguido, delgado y viril. De mirada dulce, penetrante, voz modulada y agradable, piel canela, ojos café claros, pelo y bigote negros que después se tornaron blancos y una oratoria espléndida y majestuosa elocuencia que arrebataba con imágenes y símiles que abrían y cerraban los rotundos períodos de sus discursos, que prontamente se hicieron famosos en el país, aunque no eran de índole filosófica.
Como Vicepresidente le correspondió dirigir al Consejo de Estado y a la Junta de Crédito Público, encargándose del poder por ausencia del titular entre el 23 de Marzo y el 12 de Junio de 1.905.
El Nuevo Presidente Lizardo García, le designó Primer Miembro de la Junta Consultiva del Ministerio de Relaciones Exteriores pero el 1º. de Enero de 1.906 se produjo la revolución alfarista en Riobamba y Baquerizo Moreno, en su calidad de Vicepresidente de la República, sostuvo al Presidente García en Guayaquil, llamando al General Plaza -hombre fuerte del régimen- que se hallaba en New York. Posteriormente, al conocer la derrota de Chasqui, se sostuvo firmemente, hasta que el día 19 salió el pueblo a las calles a proclamar a Alfaro y tras intensos tiroteos tuvo Baquerizo Moreno que esconderse.
A raíz de esos sucesos volvió a la profesión e instaló su estudio profesional en la casa de su suegro el Dr. Emilio Gerardo Roca Andrade ubicado en Malecón y P. Ycaza, sin ninguna influencia política.
En 1.910 editó "El Nuevo Paraíso" en 48 págs. El 11 fue designado Miembro de la Junta Municipal de Beneficencia y entre el 12 y el 15 fue el Vice Director. El 12 salió electo Senador por el Guayas, concurrió al Congreso y lo presidió apoyado por Plaza, encargándose de la Presidencia por segunda vez por el lapso de veinte días, mientras se realizaban los escrutinios que favorecieron al General Leonidas Plaza para un segundo mandato.
Entre 1.913 y el 15 me reelecto Presidente del Senado. Entre el 22 y el 31 de Marzo de 1.913 se encargó del Poder por tercera ocasión. Al año siguiente ejerció el mando por varias ocasiones mientras duraban las ausencias del titular Plaza en Esmeraldas.
En 1.915 fue propuesto su nombre para ocupar la Presidente de la República en el semanario Liberal "La República" y pronto concitó simpatías en el resto del país. Los Radicales no presentaron candidato y los Conservadores intervinieron a través del Dr. Rafael María Arízaga.
Realizadas las votaciones en 1.916 triunfó Baquerizo Moreno, quien se posesionó el 1o. de Septiembre, encontrando a la República arruinada por la larga lucha armada en Esmeraldas y dividida por los asesinatos de los Alfaros, sus Tenientes y el General Julio Andrade, sin embargo, durante su mandato, la prensa gozó de amplias garantías y hubo una relativa tranquilidad, amagada por las insurrecciones de J. Federico Intriago en Los Ríos y de Clotario Paz Paladines en El Oro.
Decretó la jornada máxima de ocho horas de trabajo. En 1.918 el Diputado Víctor Manuel Peñaherrera logró la abolición de la prisión por deudas o abolición del Concertaje y la promulgación de la célebre Ley de Jornaleros, inspirándose en un proyecto presentado años atrás por el Senador por Loja, Agustín Cueva Sanz.
En 1.917 visitó el Archipiélago de Colón y fundó la población de Puerto Baquerizo Moreno. El 20 se entrevistó con el Presidente de Colombia, Dr. Marco Fidel Suárez, en el puente internacional de Rumichaca.
Ese año le sucedió el Dr. José Luis Tamayo y al inaugurar sus sesiones el Congreso, Baquerizo Moreno se despidió diciendo "He venido cubierto con el triunfo de cuatro años de paz sobre mis hombros y acompañado de hechos que serán de recuerdo perdurables y de palabras que acaso, acaso, no morirán", sin embargo, el principal problema de su gobierno, el económico, quedaba latente porque no pudo incrementar el ahorro nacional.
En 1.924 fue designado Embajador Especial ante el Perú y presidió la Delegación ecuatoriana al Centenario de la Batalla de Ayacucho que selló la independencia de esa nación y de Sudamérica.
En 1.925 fue Presidente de la Comisión Revisora de la Constitución y Leyes. El 30 pronunció en Quito su célebre Discurso en el Centenario de la Primera Asamblea Constituyente, el 31 fue electo Senador por el Guayas y presidió el Congreso. El 15 de Octubre se encargó del mando al producirse la caída aparatosa de la dictadura del Coronel Luis Larrea Alba y convocó a elecciones. Baquerizo Moreno salvó la hora crítica de la Democracia, pero Neptalí Bonifaz se presentó como el candidato más fuerte de los Conservadores y a la postre, surgió el problema de su dudosa nacionalidad y se caldearon los ánimos, hubo manifestaciones públicas pidiendo su renuncia y la del Congreso y algunos batallones se levantaron en armas en la capital. Baquerizo Moreno fue presionado y viendose solo entregó dócilmente el mando a un bonifacista y se asiló en la Legación argentina, donde permaneció con grave peligro de su vida durante la fatídica "Guerra de los cuatro Días".
En 1.935 salieron "Discursos, Alocuciones, Cartas, Artículos, Telegramas" en 82 págs. y en 1.937 la Academia Ecuatoriana de la Lengua editó su novela “Tierra Adentro" en 108 págs. escrita en 1.898, relación de un viaje por el interior del país y humorística alegoría de nuestras guerras civiles. Esa novela fue republicada por el diario "El Telégrafo" en entregas el 39. Fue un anacronismo literario.
Al fallecimiento de su primo político y cliente principal Juan Francisco Marcos Aguirre se retiró de la Asesoría Jurídica de la familia Marcos, quienes le siguieron pasando una pensión jubilar. Entonces fue designado Abogado del Banco Hipotecario del Ecuador, transformado después en Banco de Fomento, donde laboró casi hasta su muerte porque siempre había sido pobre.
El 25 de Octubre de 1.937 falleció su esposa de una afección cardiaca. El escribió "Cuanta gente en torno mio, pero que soledad en mi".
En 1.939 cumplió ochenta años fue objeto de numerosos homenajes. El 40 aparecieron "Crónicas del Homenaje" y la Municipalidad de Guayaquil editó en su honor una "Selección de Ensayos" con apuntes y discursos suyos, en 195 págs. El 44 intervino en los actos realizados en Cuenca en Homenaje a Roberto Crespo Ordóñez. El 46 salieron a la luz sus traducciones y divagaciones sobre Horacio en 69 págs, y dijo con tal motivo "Amé a Virgilio y comenté a Horacio. El genio puede a veces más que el amor. También salió "De ayer y de hoy" con escritos varios en 173 págs. y la segunda edición de sus cuatro novelas.
Vivía "en su retirada y silenciosa casita en las Peñas" y empezó a anotar en un librito de bolsillo sus soliloquios. Su nieto Ernesto Baquerizo Lince le acompañaba por las noches. De esa época en su pensamiento "Mi presencia nada, mi recuerdo algo."
En 1.951 enfermó gravemente con un cáncer a la vejiga y fue llevado por su hija María Teresa y su yerno Eduardo López Proaño que mucho lo quería, al Medical Center de New York, donde le operó el Dr. Masón con éxito, pero a la mañana siguiente 23 de Marzo, mientras estaba sobresentado en su cama, al pie de una ventana, y mirando a la calle porque acababa de llover y estaba mojada, le sobrevino un violento vómito de sangre y quedó inconciente, falleciendo a las pocas horas y sin recobrar el conocimiento. Por eso se dijo que no sufrió y que aparentemente quedó dormido. Sus restos fueron repatriados y reposan en el Cementerio General de Guayaquil.
En 1.959 se publicaron sus "Pensamientos" en 53 págs. con prólogo de Adolfo H. Simmonds. También ha pasado Baquerizo Moreno a la historia por sus frases hechas, llenas de humor y hasta de Filosofía. Al inaugurar el puente de Rumichaca con el Presidente Marco Fidel Suarez: "Un puente más, un abismo menos; Cayó Paz para que la paz impere", dicha al develar la revolución de Clotario Paz en El Oro, "Habló Bolívar, y terminó el Mensaje", al finalizar uno de sus mensajes presidenciales al Congreso Nacional.
Brilló como poeta suave y becqueriano, por eso se dijo de él "Alfredo Baquerizo Moreno, el singular, él hizo a las espinas en rimas florecer, el que en sus labios tuvo la palabra de ayer, y en su diestra la pluma para el alto pensar...".

Jamil Mahuad

Durante años ejerció el profesorado en la PUCE, el Colegio de San Gabriel y el Centro de Ejecutivos en Quito. Entre 1973 y 1983 prestó servicios de asesor legal y gerente en instituciones financieras y empresas públicas ecuatorianas, como la Empresa Nacional de Productos Vitales (Enprovit), y practicó la abogacía en los tribunales del Estado. 
Miembro desde 1981 de la Democracia Popular-Unión Demócrata Cristiana (DP-UDC), partido centrista originado en 1964 a partir de una disidencia del más conservador Partido Social Cristiano (PSC) y que ostentaba responsabilidades en el poder ejecutivo desde agosto de 1979 como aliado del malogrado presidente Jaime Roldós Aguilera y su Concentración de Fuerzas Populares (CFP), entre 1983 y 1984 sirvió como ministro-secretario de Estado de Trabajo y Recursos Humanos en el Gobierno presidido por Osvaldo Hurtado Larrea, jefe de la formación y sucesor de Roldós en la jefatura del Estado en mayo de 1981. Durante las legislaturas 1986-1988 y 1990-1992 fungió también de diputado en el Congreso Nacional representando a la provincia de Pichincha, que incluye a la capital del país. 
Mahuad quedó, con el 11% de los votos, en quinto lugar en las presidenciales del 31 de enero de 1988, que ganó el socialdemócrata Rodrigo Borja Cevallos, del partido Izquierda Democrática (ID), al que apoyó en la segunda vuelta frente al empresario populista Abdalá Bucaram Ortiz, del Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE). La compensación por esta derrota vino sobradamente en los comicios del 17 de mayo de 1992, que le otorgaron la siempre codiciada alcaldía de Quito, oficina en la que fue reelegido el 19 de mayo de 1996. 
Su primer mandato cuatrienal como primer edil coincidió con la administración presidencial del conservador Sixto Durán-Ballén, quien había encabezado también el consistorio quiteño en los años setenta. Mahuad figuró como director nacional, esto es, máximo responsable, de la DP-UDC en los períodos 1987-1988 y 1991-1993, y entre 1991 y 1998 sirvió asimismo como vicepresidente para el Área Andina de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) y vicepresidente de la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas (UCCI). 
De cara a las elecciones presidenciales del 31 de mayo de 1998 Mahuad invirtió la cooperación mantenida con ID en los años ochenta y acudió aliado con el PSC, adalid de la derecha liberal. Se adelantó como el candidato más votado con el 35,3% de los votos y en la segunda y definitiva vuelta del 12 de julio batió al magnate guayaquileño Álvaro Noboa Pontón, del PRE, con el 51,1%. En las legislativas, la DP-UDC fue la fuerza que más escaños obtuvo, 35. Como en anteriores convocatorias, los comicios fueron una expresión de la dicotomía geopolítica entre la Costa y la Sierra, representando Noboa el primer ámbito y Mahuad el segundo. 
Luego de impugnar Noboa los resultados, el 20 de julio el Tribunal Supremo Electoral confirmó la victoria de Mahuad, que en la segunda ronda había recibido el apoyo de los líderes de las principales fuerzas políticas, incluidos el socialcristiano Jaime Nebot Saadi y el ex presidente Borja, los cuales veían con desconfianza el populismo de Noboa. La victoria de Mahuad fue tanto más resonante si se tiene en cuenta que los aspirantes de la DP-UDC en las anteriores convocatorias electorales, Vladimiro Álvarez en 1992 y Rodrigo Paz Delgado en 1996, sólo habían podido quedar en octava y cuarta posición, respectivamente. Con su toma de posesión el 10 de agosto de 1998 sucediendo al presidente interino Fabián Alarcón Rivera y con mandato hasta 2002, Mahuad cerró el año de provisionalidad abierto con la destitución por el Congreso del controvertido presidente Abdalá Bucaram, amigo y mentor político de Noboa, en cuya caída en febrero de 1997 él había participado activamente, siendo uno de los promotores de las protestas populares. Por otro lado, la asunción presidencial coincidió con la entrada en vigor de la nueva Constitución redactada por la Asamblea Nacional Constituyente. 
Con una imagen de político serio y capacitado, partidario de la economía social de mercado (“criterios de derecha en lo económico, criterios de izquierda en lo social"), Mahuad hizo un diagnóstico técnico de la negativa situación económica y delineó sus objetivos de gobierno. 
Estos eran: la consecución de una paz efectiva con el Perú (ambos países habían sostenido en enero y febrero de 1995 una breve pero intensa guerra fronteriza en la cuenca alta del río Cenepa, último episodio de más de medio siglo de escaramuzas periódicas), ya que, en su opinión, la estabilidad regional traería grandes incentivos económicos; el recorte del déficit del Estado, poniendo coto al gasto público que había caracterizado la administración Bucaram, y racionalizando el sistema fiscal, en consonancia con los requisitos del FMI; la dotación de facilidades a la inversión extranjera; y, el relanzamiento de los procesos de privatización de empresas públicas. Adicionalmente, y en aparente contradicción con estas medidas de saneamiento y desregulación, anunció un ambicioso plan contra la pobreza, reformas en el sistema educativo y la creación de 900.000 puestos de trabajo por contrataciones de obras públicas. 
En el ámbito diplomático, Mahuad se mostró extremadamente activo y en dos meses sostuvo seis reuniones con su homólogo peruano Alberto Fujimori. Los dos dirigentes escenificaron su voluntad de solucionar el añejo contencioso territorial del Alto Cenepa en la Cumbre Iberoamericana de Oporto y días después, el 26 de octubre, firmaron en Brasilia un acuerdo de paz que reconocía la delimitación de la frontera trazada por los países garantes del Protocolo de Río de Janeiro de 1942, es decir, la que señalan las cumbres de la Cordillera del Cóndor. El arreglo fue interpretado como más satisfactorio para las tesis del Perú, que siempre había aceptado la demarcación de 1942, a diferencia de Ecuador. 
Las relaciones con Estados Unidos se estrecharon con la firma el 12 de noviembre de 1999 del denominado Acuerdo de Cooperación concerniente al Acceso y Uso de los Estados Unidos de las instalaciones en la Base de la Fuerza Aérea Ecuatoriana en Manta para Actividades Aéreas Antinarcóticos. Con este acuerdo, valedero por diez años, la superpotencia norteamericana obtenía en la provincia costeña de Manabí una facilidad muy provechosa para su lucha contra el tráfico ilícito de estupefacientes en la región andina. La presencia militar estadounidense en el Ecuador no fue bien acogida por movimientos sociales y partidos de izquierda, que acusaron a Mahuad de involucrar al país en el controvertido Plan Colombia por la puerta trasera. 
En cuanto a la ejecución de sus proyectos económicos, Mahuad encontró obstáculos infranqueables desde el primer momento. En los meses inmediatos a su inauguración, el Gobierno devaluó el sucre, liberalizó el precio de los combustibles, suprimió los subsidios para el consumo eléctrico e introdujo una serie de medidas de austeridad cuyo costo recayó directamente sobre las rentas de la población. 
El 11 de marzo de 1999, ante el acelerado declive económico (tasa de crecimiento negativo, inflación interanual del 50%, ahondamiento del déficit fiscal hasta suponer el 6% del PIB, depreciación masiva del sucre frente al dólar, evaporación de las reservas de divisas, aceleración de la fuga de capitales), Mahuad anunció un drástico paquete de medidas consistente en el incremento del precio de los combustibles en un 174%, la congelación parcial de los depósitos bancarios de particulares durante un año, el control por el Estado de más de la mitad del sistema bancario nacional y la clausura temporal de todos los bancos. 
Al mismo tiempo, envió al Congreso una decena de proyectos de ley que contenían reformas fiscales, como el aumento del IVA del 10 al 15%, y otras destinados a dar vía libre a la privatización general de los servicios públicos, afectando a la telefonía (Pacifictel y Andinatel), la electricidad (Inecel) y los hidrocarburos (Petroecuador); en los dos últimos casos se seguiría el modelo aplicado por el Gobierno de Alarcón con la Empresa Estatal de Telecomunicaciones (Emetel), y antes de sacar a subasta los monopolios, escasamente atractivos para los licitadores extranjeros, se procedería a su escisión en varias sociedades anónimas -con el 100% de su capital de titularidad pública, no obstante- para la prestación de servicios especializados. 
Desde finales del año anterior, Mahuad venía advirtiendo que Ecuador se hallaba en virtual suspensión de pagos y que no podía hacer frente al servicio de la deuda pública externa, 12.800 millones de dólares (esto es, el 60% del PIB), situación que no aquejaba a un país de la región desde la aplicación del Plan Brady en 1990. Sumados los montantes privados, el total de la deuda externa ecuatoriana se acercaba a los 16.000 millones de dólares. Con tono lúgubre, el mandatario declaró que Ecuador vivía su peor crisis económica desde la década de los 30 y que tener la tasa de inflación más alta de América Latina era motivo de vergüenza nacional. 
Este conjunto de medidas draconianas suscitó una fortísima reacción popular, que diluyó en la nada la popularidad de Mahuad. Un Frente Patriótico que reunía a sindicatos, organizaciones populares y partidos políticos (luego se les sumaron representantes de la patronal) llamó a la desobediencia civil y a detener el intento de Mahuad de "consolidar el modelo económico neoliberal". 
El 17 de marzo el país quedó paralizado por una huelga general y al día siguiente Mahuad pactó con el Congreso la creación de un nuevo sistema tributario con mayor capacidad recaudatoria, retiró el paquete de proyectos de ley anticrisis, rebajó el alza de los combustibles al 49% y levantó el estado de emergencia implantado a raíz de los disturbios. La batería de medidas de contingencia económica se iba a dosificar ahora en vez de aplicarse de golpe, mientras que la transformación de Inecel en siete sociedades anónimas fue un hecho el último día del mes. La rectificación parcial de Mahuad consiguió desactivar la crisis social por el momento. 
Pero el 5 de julio de 1999 comenzó una segunda oleada de protestas, incluida una huelga general, convocada por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) que puso en jaque a Mahuad en plena negociación con el FMI, con la nueva Ley de las Finanzas Públicas bajo el brazo, para la concesión de un crédito de disponibilidad inmediata (stand-by) de 800 millones de dólares, en el que depositaba todas sus esperanzas para cubrir las más urgentes necesidades del Estado, empezando por el pago de los salarios retrasados a los funcionarios. 
El 15 de julio, luego de declarar otra vez el estado de emergencia, el presidente accedió a suspender por un año el aumento del precio de la gasolina en un 13%. Esta marcha atrás, que no evitó que miles de indígenas ocuparan Quito el día 16, si le permitió llegar el 17 a una precaria tregua con los sectores sociales afectados y levantar el estado de emergencia. A finales de septiembre Mahuad declaró la moratoria unilateral de una parte de la deuda pública adquirida en bonos Brady 
En enero de 2000 Mahuad afrontó la tercera y más peligrosa fase de la protesta social, que tomó la forma de un clamor generalizado por un cambio de rumbo en la política del mandatario. El día 9 Mahuad anunció la dolarización oficial de la economía y el anclaje de la cotización del dólar en 25.000 sucres, moneda que, sin desaparecer en un sentido estricto, en lo sucesivo funcionaría como simple unidad fraccionaria de la anterior. El Tesoro de Estados Unidos y el FMI manifestaron su sorpresa por la medida, que, aseguraron, no les fue anunciada con antelación. La inflación para el conjunto de 1999 había sido del 56% y no había visos de que el ritmo del crecimiento de los precios aminorara en los meses siguientes. 
Esta medida de choque parecía razonable desde el punto de vista técnico, aunque, de hecho, suponía un intento desesperado de estabilizar el tipo de cambio, pero en un contexto social explosivo, que se nutría de la pobreza endémica de extensas capas de la población, sirvió de espoleta para el estallido definitivo: vigente de nuevo el estado de emergencia nacional por las protestas callejeras en Guayaquil, Quito y otras ciudades, el día 12 un autodenominado "Parlamento Nacional de los Pueblos del Ecuador" llamó a la desobediencia civil y a la toma del poder ejecutivo. 
Mahuad se negó a dimitir o a revocar el decreto de dolarización, pero el viernes 21 miles de indígenas y efectivos del Ejército de rangos inferiores y medios, en inopinada alianza, ocuparon los edificios del Congreso Nacional, la CSJ y la Contraloría General, declararon cesantes los poderes del Estado y anunciaron la formación de una Junta de Gobierno de Salvación Nacional integrada por el coronel Lucio Gutiérrez Borbúa, antiguo edecán de Bucaram y Alarcón, Antonio Vargas Guatatuca, líder de la CONAIE, y Carlos Solórzano Constantine, ex presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ). 
Antes de acabar el día, Mahuad huyó del palacio presidencial de Carondelet y, tras una parada en la residencia del embajador chileno en Quito, se refugió en la base que la Fuerza Aérea tiene en el aeropuerto Mariscal Sucre, en las afueras de la capital. En cuestión de horas, las divisiones y el desorden se instalaron en la flamante Junta de Salvación, tal que Gutiérrez fue sustituido por un alto oficial menos radical, el general Carlos Mendoza Poveda, ministro de Defensa, que antes de terminar la jornada encabezó el segundo triunvirato, denominado ahora Consejo de Estado. 
El día 22 el vicepresidente Gustavo Noboa Bejarano prestó juramento como jefe del Estado tras concluir el Congreso, de acuerdo con el artículo 167 de la Constitución, que Mahuad había incurrido en el abandono del cargo, cesando automáticamente en sus funciones. El damnificado calificó de "cantinflada" el levantamiento de la víspera y declaró que con la asunción de Noboa el país retornaba al orden constitucional. 
Por lo demás, el nuevo presidente informó que la dolarización de la economía seguía su curso. A la vista de todos, el alzamiento indígena, histórico y esperanzador para unos, pintoresco, golpista y condenado al fracaso para otros, fue reconducido en cuestión de horas por la alta oficialidad del Ejército hacia una salida satisfactoria para el establishment copado por las élites blancas, el cual aceptó la caída de Mahuad pero en absoluto la toma del poder por unos sectores de la sociedad tradicionalmente marginados y menospreciados. 
Mahuad no se exilió inmediatamente, pero el 26 de febrero, tras notificar al Congreso ecuatoriano su "ausencia temporal" del país, se instaló en Perú invitado por el presidente Fujimori. De ahí pasó a Chile y posteriormente se le perdió la pista, si bien se apuntó a Estados Unidos como seguro país de acogida, probablemente en la ciudad universitaria de Cambridge, Massachusetts. 
El 13 de julio de 2000 la CSJ inició un proceso penal y dictó orden de prisión preventiva contra el ex presidente por tres supuestos de delito: violación de las garantías constitucionales de los ecuatorianos por decretar el congelamiento de los depósitos bancarios y la dolarización de la economía; extralimitación en sus funciones y abuso de poder en la toma de estas decisiones; y, uso ilegal de fondos donados por importantes empresarios a la campaña presidencial de 1998, imputación que se fundaba en una denuncia de la Comisión de Control Cívico Contra la Corrupción (CCCC, más conocida por Comisión Anticorrupción, creada por Alarcón) 
Desde su refugio secreto y a través de sus abogados, Mahuad informó de su disposición a regresar a Ecuador, pero sólo si recibía garantías de un juicio justo con cargos fundados, asegurando que no podía juzgársele por aplicar una determinada política económica ya que el Código Penal no lo tipifica como delito. A los pocos días se confirmó que se encontraba en Massachusetts, para impartir docencia como profesor visitante en el John Kennedy School of Government de la Universidad de Harvard. 
En una entrevista concedida a un diario ecuatoriano, calificó la orden de prisión de la CSJ de "linchamiento político" y criticó también la amnistía por el Congreso a los líderes de la asonada que le derrocó. El 8 de octubre de 2001 transmitió su decisión de darse de baja de la DP-UDC coincidiendo con la puesta a punto de su juicio en la CSJ por un delito de peculado. 




Aurelio Mosquera Narvaez

Médico y político quiteño nacido el 2 de agosto de 1883, hijo del Sr. Ciro Mosquera y de la Sra. Felisa Narváez.Todos sus estudios los realizó en su ciudad natal: La primaria y los primeros años de la secundaria bajo la acertada dirección de los Hermanos Cristianos de La Salle, y luego en el Colegio San Gabriel de los jesuitas donde en 1899 se graduó de Bachiller. Ingresó entonces a la Facultad de Medicina de la Universidad Central, donde el 13 de enero de 1907 obtuvo el título de Doctor en Medicina y Cirugía.A partir de 1908 y hasta 1927 fue profesor de Patología interna de la universidad quiteña; de 1926 a 1928 fue Decano de la Facultad de Medicina y ese mismo año el Consejo Universitario lo designó Rector de dicho centro de estudios superiores.Inició su participación en la vida política del país cuando fue elegido Diputado por la provincia de Pichincha al Congreso Nacional, para el período legislativo de 1914 a 1915; y luego Consejero Municipal de Quito de 1914 a 1917 y Vicepresidente del mismo en 1918. En 1925 fue nombrado Consejero de Estado, en esa delicada época de transformación socio-política que se produjo como consecuencia de la Revolución Juliana que puso fin al gobierno del Dr. Gonzalo S. Córdova; tres años más tarde fue elegido una vez más como Diputado por Pichincha a la Asamblea Constituyente, y posteriormente fue Senador de la República y Vicepresidente del Senado desde 1930 hasta 1931.Desde temprana edad había pertenecido al Partido Liberal, y en 1932 -cuando dicho partido sufría una de sus más turbulentas crisis internas- fue elegido Presidente de la Junta Suprema Liberal Radical de Pichincha, dignidad que ejerció con prudencia y tino hasta el año 1936.El 1 de diciembre de 1938, cuando el Dr. Manuel María Borrero -Encargado del Poder Ejecutivo ante la renuncia del Jefe Supremo Gral. Alberto Enríquez Gallo- presentó también su renuncia ante la Asamblea Nacional, esta se reunió de inmediato para elegir al nuevo Presidente Constitucional de la República. Ante esta situación se presentaron dos candidaturas que representaban a las dos mayorías parlamentarias: La del Dr. Francisco Arízaga Luque, por los independientes, los socialistas y una fracción de disidentes liberales; y la del Dr. Aurelio Mosquera Narváez, por el Partido Liberal Radical.A pesar de haber intentado varios acuerdos, los asambleístas no lograron los votos necesarios para elegir a ninguno de los dos candidatos, hasta que finalmente y amparados en la romántica frase de «El Socialismo se presenta para salvar al Ecuador», algunos dirigentes de dicho partido cambiaron su votación e inclinaron definitivamente la balanza. Así, con los votos socialistas, logró la mayoría necesaria que el 2 de diciembre de 1938 lo llevó a la Presidencia de la República.Al asumir el poder encontró que la economía fiscal estaba casi en bancarrota y que el Estado apenas podía pagar los sueldos; por otro lado, los mismos socialistas que lo habían respaldado con sus votos -posiblemente esperando algún beneficio político que él se negó a dar- se declararon en abierta oposición al régimen cuando comprendieron que este no estaba dispuesto a dejarse manosear.Ante las graves presiones políticas que el Congreso pretendía ejercer sobre él, su Ministro de Gobierno -Sr. Galo Plaza Lasso-, respaldado por las Fuerzas Armadas, el 14 de diciembre de 1938 disolvió la Asamblea y encarceló a varios diputados «cuyas actividades estaban encaminadas a crear una situación política preponderante y absorbente».Al romperse el orden constitucional los políticos reaccionaron violentamente en su contra y lo atacaron por todos los frentes creando un ambiente de incertidumbre que puso en peligro la estabilidad del gobierno. Entonces, hábilmente convocó a un nuevo Congreso extraordinario «que viniese a ser como el revisor del desbarajuste reinante, siempre que traduciendo el pensamiento oficial contemplase con bondad la obra incipiente del Ejecutivo. Dicho Congreso se reunió el primero de febrero de 1939» (1, y tal como lo esperaba, se constituyó en el soporte moral del gobierno dándole carácter constitucional al poner en vigencia la Constitución de 1906.En su corta administración procuró llevar al país por caminos seguros y de progreso.«La lista de sus actuaciones enérgicas y ponderadas es copiosa. En Loja no bien comienza su gobierno resuelve una delicada situación con entereza. En Quito, sofoca en enero del 39 el intento revolucionario de parte de un sargento y da de baja a cinco generales, paso atrevido que halla el beneplácito de la mayoría. Llegado el mes de marzo confronta situaciones en extremo ásperas, con la huelga universitaria del 17, que es seguida por las de las fábricas textiles. Las medidas extremas de clausura de la Universidad y del Normal Juan Montalvo, a las cuales a pesar suyo tuvo que recurrir, dan por resultado una nueva época de estudio y contracción en los planteles educacionales» (E. Muñoz Borrero.- En el Palacio de Carondelet, p. 457).

Desgraciadamente, antes de cumplir un año de gobierno, en la madrugada del 17 de noviembre de 1939 murió misteriosamente en Quito. Se anunció al país que había sido víctima de un ataque de uremia, pero en las altas esferas se habló de un suicidio con grandes dosis de Nembutal.




Jorge Salvador Lara

Nació en Quito en el año 1926. Sus estudios de la educación primaria, los realizó en el pensionado Borja; Secundarios en el Colegio San Gabriel y los superiores en las Universidades Central y Católica de Quito. Estudió leyes, obteniendo el título de doctor en Jurisprudencia y Ciencias Sociales.
CARGOS: Cónsul General en Lima en 1953; Ministro de Relaciones Exteriores, en 1966. Es miembro de la Academia Nacional de Historia y de la Academia de la Lengua. La mayor parte de sus obras publicadas que son más de 70, se refieren o tienen que ver con la historia del Ecuador. Entre estas obras se destacan: "García Moreno y los Estudios Científicos del Ecuador", "Quito en la Prehistoria". Es también catedrático, profesor de la Universidad Católica.
A Jorge Salvador Lara, es común encontrarle en la Circasiana, rodeado de libros, de la biblioteca de la institución, se dedica a la investigación, principalmente a la historia.
El Cabildo Quiteño lo designó Cronista de la Ciudad; por tanto, siempre se encuentra junto a los libros viejos y amarillentos en la biblioteca del Municipio de Quito.
En el año de 1995, recibió el "Premio Nacional Eugenio Espejo", conferido por decreto presidencial.
Este premio lo ha dedicado Jorge Salvador Lara a la vida diplomática y de historiador.
Salvador Lara pertenece a una línea muy clara de contar la historia con mucha habilidad y maestría. En sus obras, los personajes, los hechos y las fechas son trascendentales. El análisis de las diferentes cirscunstancias históricas son analizadas objetivamente, para mantener aquella claridad que requiere la historia, para ser asimilada fácilmente por quienes la estudian.
Cabe destacar que ha sido un brillante parlamentario y político afiliado al partido conservador Ecuatoriano. Su fe y convencimiento católico ha demostrado en su vida pública. Las conferencias sustentadas sobre temas católicos y marianos, traducen la sapiencia y convencimiento de sus excelentes trabajos literarios.

http://www.explored.com.ec/ecuador/tradicio/homb103.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/Jorge_Salvador_Lara
http://davidlemaburgos.com/2012/02/08/ultimo-editorial-de-salvador-lara/



José Jiménez Jiménez

El Ing. José Jiménez Jiménez se graduó en el Colegio San Gabriel en el año 1965, en la especialidad de Físico Matemáticas. Posteriormente ingreso a la Universidad Central del Ecuador, obteniendo el título de Ingeniero Civil, en su carrera profesional obtuvo algunas maestrías tanto nacionales como internacionales dándole una posición y prestigio profesional, para que en la actualidad desempeñe el titulo de profesor catedrático en la Universidad Central en la Facultad de Ingeniería, en la materia de Construcciones.
Gracias a los estudios realizados en el Colegio San Gabriel el ingeniero Jiménez opina que el CSG le ha dado buenas bases ya que su educación es óptima, por la enseñanza, experiencia y exigencia de los profesores los cuales han enseñado sus asignaturas con mucha capacidad y exigencia a sus estudiantes.
http://csg150gabrielinos.blogspot.com/
http://www.scribd.com/fjrobalino/d/50552024-notimarzo2011


Alejandro Ribadeneira Tobar

Alejandro Ribadeneira Tobar (1973) es periodista, coordinador del vespertino Últimas Noticias. En HOY, donde se inició en el periodismo, publicó memorables crónicas de la campaña electoral de 1996. Sus libros son: El obituario de los vivos (poesía, 1995), The Mugre Music Band (cuentos, 2000), El buitre soy yo (cuentos, 2004) y Las traigo muertas (cuentos, 2005). Obtuvo el tercer lugar en la Bienal de Cuento Ecuatoriano, en 2001.
http://www.hoy.com.ec/noticias-ecuador/la-sal-quitena-sazona-cuentos-perversos-212319-212319.html



Andrés León

El aporte de Andrés León a la sociedad se ha evidenciado sobre todo en la comunicación y la política.  Sus dos principales campos de acción, en los que ha demostrado su total compromiso y dedicación.  Esto se ha reflejado también en su actividad académica y sus distintas publicaciones.

En comunicación se destaca su labor como editor de Ser Familia, además de investigador y documentalista de temas comunicacionales.  También fue presidente de la Asociación de Comunicadores Cristianos de Ecuador y miembro de organismos internacionales.  Su desempeño político sobresale por el cumplimiento de las responsabilidades que se le han encomendado, tanto en el Congreso Nacional como diputado y en el Tribunal Supremo Electoral como vocal nacional, entre otras tantas dignidades.
Fue candidato para el parlamento Andino en las últimas elecciones, se lanzo por el partido UDC Unión Demócrata Cristiana la lista 5.

Su visión de servicio a la comunidad se ha expresado en la práctica de sus vocaciones humanas y cristianas, procurando cumplir cada tarea con honradez, dedicación y profundo compromiso.  La política como en la comunicación son actividades que permiten un servicio solidario a la sociedad.

Lo que le incentivó sin duda, fue la formación recibida en el hogar y en el colegio.  La vida gabrielina en torno a la Virgen Dolorosa, el modelo jesuítico de enseñanza hacia la dirigencia y, por cierto, la actividad como miembro del Club de Ascecionismo del Colegio San Gabriel, le inspiraron hacia ideales muy altos, nobles y profundamente humanistas.
  “Más que una anécdota, un recuerdo profundo que marco mi vida fue la despedida del edificio antiguo del colegio, en centro de Quito.  En una pequeña sala, a la cual entrábamos uno a uno los neo bachilleres, estaba el cuadro del Milagro, frente al que teníamos muy poco tiempo, un minuto a lo mejor, para hacer una oración.  Pero era tan directa la comunicación y tan íntima y sentida, que las promesas hechas vuelven a mi memoria y a mi conciencia, guiándome siempre a cumplir mis palabras, inclusive ahora, en la vejez”.


Nelson Patricio Mejia Jijon

Nació en Quito el 4 de junio 1972, sus padres son el Sr. Patricio Mejía Galarraga y la Sra. Emma Judith Jijón, los cuales tuvieron cinco hijos y es el segundo de cuatro hermanos.
Sus estudios primarios los realizo en la Escuela Don Bosco terminando la primaria con muchos éxitos.
Los estudios secundarios los realizo en el Colegio San Gabriel graduándose de Físico Matemático en el año 1990.
Después  su gran anhelo  fue de ingresar a la Escuela Superior Militar Eloy Alfaro el cual rindió los exámenes de ingresos los cuales alcanzo las notas que exigían para ingresar  y fue aprobado para su ingreso. El 7 de agosto de 1996 ingreso a la Escuela Militar como cadete, realizó muchos cursos que exigían para poder culminar los cuatros años que tenía que permanecer allí, estuvo en la Ciudad de Riobamba listo y dispuesto para el conflicto del Cenepa, luego se gradúo de oficial de nuestro Ejército Ecuatoriano como Subteniente.
Una vez que se graduó tenía que prestar sus servicios en  varias ciudades de nuestros país así que estuvo en Esmeraldas en el año 1998 en el Batallón de ingenieros 67 Montufar, luego a la provincia del Oro en Santa Rosa en el año 2000 en la Compañía de Ingenieros Quitumbe , luego residió a Quito-Amaguaña en el año 2002 al Batallón de Ingenieros 68 Cotopaxi, al Comando General de Desminado Humanitario el cual se especializo en minas siguiendo cursos y viajando al exterior a Suiza para perfeccionar su conocimiento, estuvo en la frontera y oriente levantando las minas antipersonales que los Peruanos sembraron en suelo Ecuatoriano y estaba matando a nuestra gente ya que las personas  todavía vivían  por esas tierras. También participo en la explosión de Riobamba, siendo ya teniente fue la primera persona que llego a la zona de desastre a limpiar las minas y todos los artefactos que cayeron en toda la Ciudad de Riobamba. Después fue designado con el pase al Comando Ductos y refinería en el año 2006 el cual fue Jefe del Poliducto Quito-Ambato cuidando toda la refinería.
 En el 2008 fue dado el pase al del arma de ingeniería, fue designado para que cumpla misiones de Paz en el país de Haití, el cual viajo en  junio del 2009 por 6 meses  y medio, meses en el cual prestó sus servicios  a la gente de ese país como niños, madres solteras, ancianos, hizo carreteras, escuelas y más que todo luchar y ayudar a las personas con la tanta pobreza que ese país está pasando, experiencia muy dura pero al mismo tiempo muy gratificante por ayudar al prójimo y sacrificar el estar tantos días sin la familia y en otro país. El Capitán Nelson Mejía regresa al país el 10 de enero del 2010, dos días antes del terrible terremoto que sufrió Haití el 12 de enero del 2010 a las 16H53. En este momento es Jefe de Personal del Comando Ductos y Refinería  en el Cuerpo de Ingenieros del Ejercito  en el mes de Julio de este año va a ingresar a la Academia de Guerra para ascender a Mayor del Ejército, requisito que necesita para ir a los país de Sudan  o Costa de Marfil por medio de la ONU en misiones de paz o como se los conocen como los Cascos Azules.

http://elretocontinuacsg.blogspot.com/2012/02/v-behaviorurldefaultvmlo.html




Josde Maria Velasco Ibarra

(Quito, 19 de marzo de 1893 – Quito, 30 de marzo de 1979)
Fue Presidente del Ecuador por elección popular en cinco ocasiones y Jefe Supremo en dos.
Su figura lideró la escena política ecuatoriana durante una gran parte del siglo XX. Profundamente católico y con un gran intelecto, notable Político, Escritor y Pensador. Su mayor relevancia en la historia de Ecuador es haber implantado en el país, la Libertad Electoral, La Libertad de Educación y la Libertad Religiosa. Sus mayores obras fueron algunos de los sistemas de carreteras que cubren el territorio ecuatoriano, una gran cantidad de escuelas y colegios y fortalecer a las Fuerzas Armadas; defensor del sufragio universal y creó el Patronato del Niño (hoy Instituto Nacional Del Niño Y La Familia - INNFA) para el amparo de la niñez ecuatoriana, la Casa de la Cultura Ecuatoriana y la Universidad Católica de Quito. El Presidente Velasco Ibarra, está considerado entre los diez más notables ecuatorianos de la historia y el Personaje del Siglo XX. José María Velasco Ibarra, fue electo Presidente de la República en cinco ocasiones y derrocado en cada uno de sus gobiernos por golpes militares, con excepción de su tercer mandato (1934-1935),(1944-1947), (1952-1956), (1960-1961) y (1968-1972). 
SUS PRIMEROS AÑOS.-
Nació en Quito el 19 de marzo de 1893. Fue hijo de Delia Ibarra y Alejandrino Velasco, un ingeniero civil de fuerte temperamento. Su padre fue un activista político del partido conservador durante la dictadura instaurada por la revolución liberal. Nunca fue a la escuela y realizó sus estudios con su madre, Delia Ibarra Soberçon. A los 16 años, sufriço la perdida de su padre; sus estudios secundarios los hizo en los colegios centenarios San Gabriel y el Instituto Nacional Mejía y se graduó de Doctor en Jurisprudencia en la Universidad Central del Ecuador.
Fue un notable escritor, publicó varios libros, entre los que se encuentra Conciencia y Barbarie, y escribió también para diario...

http://www.eruditos.net/newsite/index.php?option=com_content&view=article&id=883:velasco-ibarra-jose-maria&catid=72:biografias&Itemid=100
http://www.buenastareas.com/ensayos/Biografia-De-Velasco-Ibarra/1332369.html
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/v/velasco_ibarra.htm

lunes, 5 de marzo de 2012

Jesuitas Destacados

1) San Ignacio de Loyola Fundador de la Compañía de Jesús (Loyola, Guipúzcoa, 1491 - Roma, 1556). Su primera dedicación fueron las armas, siguiendo la tradición familiar. Pero, tras resultar gravemente herido en la defensa de Pamplona contra los franceses (1521), cambió por completo de orientación: la lectura de libros piadosos durante su convalecencia le decidió a consagrarse a la religión. Se retiró inicialmente a hacer penitencia y oración en Montserrat y Manresa, donde empezó a elaborar el método ascético de los Ejercicios espirituales (1522). Luego peregrinó a los Santos Lugares de Palestina (1523). De regreso a España comenzó a estudiar (ya con 33 años) para poder afrontar mejor su proyecto de apostolado, en las universidades de Alcalá de Henares, Salamanca y París. Las primeras actividades de San Ignacio de Loyola difundiendo el método de los ejercicios espirituales le hicieron sospechoso de heterodoxia (asimilado a los «alumbrados» o a los seguidores de Erasmo): en Castilla fue procesado, se le prohibió la predicación (1524) y hubo de interrumpir sus estudios. En cambio en París (1528-34), donde se graduó como maestro en Artes (aunque no terminó los estudios de Teología), San Ignacio de Loyola consiguió reunir un grupo de seis compañeros a los que comunicó sus ideas y con los que sembró el germen de la Compañía de Jesús, haciendo juntos votos de pobreza y apostolado en la Cueva de Montmartre. Ante la imposibilidad de marchar a hacer vida religiosa en Palestina, por la guerra contra los turcos, se ofrecieron al papa Pablo III, quien les ordenó sacerdotes (1537). En los años siguientes se dedicaron al apostolado, la enseñanza, el cuidado de enfermos y la definición de una nueva orden religiosa, la Compañía de Jesús, cuyos estatutos aprobó el papa en 1540; San Ignacio de Loyola, cuyo fervor y energía inspiraban al grupo, fue elegido por unanimidad su primer general. La Compañía reproducía la estructura militar en la que Ignacio había sido educado, pero al servicio de la propagación de la fe católica, amenazada en Europa desde las predicaciones de Lutero; las Constituciones que Ignacio le dio en 1547-50 la configuraron como una orden moderna y pragmática, concebida racionalmente, disciplinada y ligada al papa, para el cual resultaría un instrumento de gran eficacia en la «reconquista» de la sociedad por la Iglesia en la época de la Contrarreforma católica. Aquejado de graves problemas de salud, San Ignacio de Loyola alcanzó a ver, sin embargo, en sus últimos años de vida, la expansión de la Compañía por Europa y América, con una fuerte presencia en la educación de la juventud y en el debate intelectual, en el apostolado y en la actividad misionera (destacando la labor en Asia de Francisco Javier). Muerto Ignacio, le sucedió como general de los jesuitas su más estrecho colaborador, el castellano Laínez. Fue canonizado en 1622 por Clemente XV.


2) Jean Daniélou Teólogo francés, autor de numerosas obras de historia de la iglesia primitiva, liturgia, ecumenismo y misionología. Hijo de Charles Daniélou, diputado y ministro durante la Tercera República, y de Madeleine Clamorgan, mujer de alto nivel intelectual y espiritual, realizó sus primeros estudios en su pueblo natal, para continuarlos luego en la facultad de Letras del Instituto Católico de París. En 1929 entró en el noviciado de la Compañía de Jesús de Laval, donde profesó el 21 de noviembre de 1931; fue ordenado sacerdote el 24 de agosto de 1938. En 1941 llegó a París para preparar su doctorado en Teología en el Instituto Católico, en tanto que se desempeñaba como capellán del Grupo Católico de Letras, con el que empezó las peregrinaciones de estudiantes a Chartres; durante el mismo tiempo fue también capellán de la Escuela Superior Femenina de Sévres. En 1942 publicó su obra Le Signe du Temple ou de la Présence de Dieu, pequeño libro del cual él mismo dijo que contenía todo su pensamiento en forma embrionaria. Humanista y religioso a la vez, para sus dos doctorados -el de teología en el instituto Católico y el de Letras en la Sorbona- escogió un mismo tema: La doctrine mystique de saint Grégoire de Nysse. En 1943 sucedió al P. Lebreton en la cátedra sobre los orígenes del cristianismo en el instituto Católico de París. Hombre de diálogo y de convicción, supo unir a su tarea de profesor la de pastor. En 1944 fundó el Círculo de San Juan Bautista, que era un grupo de jóvenes con inquietudes misioneras del que Daniélou sería capellán y director espiritual; su objetivo era establecer relaciones amplias con los grupos no cristianos, para constituir comunidades cristianas sin que tuvieran que romper con su entorno cultural, algo así como hizo el primitivo cristianismo con las culturas semita, judeo-cristiana y greco-romana. Junto con el P. De Lubac, inició la colección "Sources chrétiennes", cuyo primer número fue La vie de Moïs, de San Gregorio de Niza. En 1961 fue constituido decano de la Facultad de Teología del Instituto Católico, y al año siguiente el Papa Juan XXIII le escogió como "perito" para el Concilio Vaticano II y trabajó en el documento de la Gaudium et Spes. Fue consagrado obispo en París el 21 de abril de 1969 y Pablo VI le nombró cardenal 28 de abril del mismo año. Desde ese cargo, sin dejar sus tareas habituales, se constituyó en la voz que proclamaba la fidelidad al evangelio, en aquellos años en que esa fidelidad estaba siendo debilitada por los "reduccionistas" y por los que, en la práctica, según su criterio, traicionaban al Concilio. De esta forma, Daniélou, que antes del Concilio se había mostrado como un "vanguardista", aparecía ahora, en el sentir de algunos, como un reaccionario. No obstante, él siempre afirmó que ahora, como antes, era un hombre libre y fiel al Evangelio, sin ceder a presiones de determinadas facciones o escuelas de pensamiento. En esta lucha perdió popularidad, pero aceptó esta realidad convencido de que ella era un efecto de su fidelidad a la iglesia. En 1972 sucedió al cardenal Tisserant como miembro de la Academia Francesa. Su producción literaria se puede distribuir en varios campos. El primero es el que se refiere a la historia de la Iglesia, más concretamente a las fuentes griegas y judías, y en él destacan obras como: Histoire des doctrines chrétiennes avant Nicée (3 vols.: "Théologie de judéo-christianisme", 1958; "Méssage évangelique et culture hellénistique aux IIe et IIIe siècle", 1961; y "Les origines du christianisme latin", 1978), que más que una historia de los dogmas en sentido tradicional es una historia de la cultura cristiana; Nouvelle Histoire de l'Église (1963) y Études d'exégèse judeo-chrétienne (1966). Su pensamiento en el campo de la misionología y del ecumenismo lo plasmó en estas obras dirigidas a la orientación del Círculo de San Juan Bautista: Le myustère du salut des nations (1945), Le Mystère de l'Avent (1948), L'essai sur le mystère de l'histoire (1953), Les saints païens de l'Ancient Testament (1956), Jean-Baptiste témoin de l'Ageau (1964), L'Église des apôtres (1970), Au commencement (1963), Les evangiles de l'enfance (1967), La résurrection (1969). En el campo de la espiritualidad son de mencionar las siguientes obras: L'oraison problème politique (1965), L'avenir de la religion (1968), Christianisme de masse ou d'élite (1968), Tests (1968), La foi de toujours et l'homme d'aujourd'hui (1969), Nouveaux tests (1970), La culture trahie par les siens (1972) y Pouquoi l'Église (1972).  



3) Matteo Ricci Nacido en Macerata, en los Estados Pontificios (actualmente en Italia), estudió en la escuela jesuita local y en 1568 se desplazó a Roma, donde comenzó estudios de derecho. En 1571 pasó a formar parte de la Compañía de Jesús. Fue alumno del también jesuita Cristóbal Clavio, con quien estudió matemáticas y astronomía.
En 1577 continuó sus estudios en la Universidad de Coímbra. Ese año solicitó formar parte de una expedición misionera a Asia, y en1578 se embarcó desde Lisboa con destino a Goa, enclave portugués en el este de India. Nunca volvería a Europa. Matteo Ricci continuó la misión jesuita en China de los misioneros que le habían precedido, entró en China, entonces bajo el gobierno de la dinastía Ming, ocultando su intención de propagar una religión extranjera. Se instaló en la ciudad de Zhaoqing, provincia de Guangdong, donde se dedicó a un estudio intenso de la lengua china. En Zhaoqing, Ricci elaboró el mapa Kunyu Wanguo Quantu, un mapamundi basado en los conocimientos cartográficos europeos. Este mapa fue la primera obra cartográfica en China que incluía territorios de Europa, África y América.
En 1589 se vio obligado a abandonar Zhaoqing, instalándose en Shaozhou, también en Guangdong. Allí enseñó matemáticas a intelectuales chinos, que de esta manera entraron por primera vez en contacto con la tradición matemática europea.
Su actividad misionera comenzó a tener éxito, y su conocimiento de la ciencia europea le dio fama en la zona. Además, Ricci adoptó la forma de vestir china, e intentó una adaptación del cristianismo a la realidad china. Esta actitud fue una fuente de conflicto con el Vaticano, que veía con reticencia cualquier intento de adaptar los ritos a las costumbres chinas en la evangelización de China. Ricci fue quien acuñó muchos de los términos cristianos utilizados aún hoy en día por los cristianos chinos, como 上帝 (Shāngdì, "Dios") y 天 (tiān, "cielo").
En 1595, ansioso por llevar el cristianismo a toda China, Ricci se instaló en Nanchang, provincia de Jiangxi. Aunque había intentado establecerse en la capital Ming, Pekín, no le fue autorizada la entrada, y permaneció primero en Nanchang y después en Nankín hasta el año 1601, cuando el emperador Wanli, habiendo oído las historias sobre el sabio europeo, le convocó a la corte imperial.
Matteo Ricci vivió en Pekín hasta su muerte en 1610.
4) San Pedro Claver Misionero jesuita español que desempeñó una vasta labor evangelizadora en Cartagena de Indias, bautizando y adoctrinando a los esclavos que llegaban de África. Canonizado por la Iglesia en 1888 y patrón de Colombia, es llamado, tal y como él mismo se definió, El apóstol de los negros o El esclavo de los negros. Hijo de los labradores Pedro Claver y Minguella y Ana Corberó, quedó huérfano de madre a los trece años de edad. Puesta de manifiesto su vocación religiosa, dos años después recibió la tonsura eclesiástica de manos del obispo de Vic en la parroquia de su localidad natal, Verdú. Se trasladó a Barcelona para iniciar estudios de gramática en el Estudio General de la Universidad. A mediados de 1600 o 1601, terminada la retórica, pasó al Colegio Jesuita de Belén para cursar filosofía. Allí decidió ingresar en la Compañía de Jesús, y el 7 de agosto de 1602 entró en el noviciado de Tarragona. Tras hacer los votos, fue enviado a Gerona para ampliar sus estudios de humanidades y luego, el 11 de noviembre de 1605, al colegio de Montesión en Palma de Mallorca para cursar filosofía. Allí trabó gran amistad con el portero Alonso Rodríguez, un anciano hermano lego que le imbuyó la inquietud misional. En 1608 se trasladó a Barcelona para estudiar teología. No pudo terminar los estudios, pues recibió una carta del Provincial, fechada el 23 de enero de 1610, por la que se le concedía el permiso para trasladarse a América, como era su deseo. Claver viajó hasta Tarragona para unirse a otros religiosos y seguir hacia Valencia y Sevilla, donde otros jesuitas se sumaron al grupo. Embarcó en el galeón San Pedro (perteneciente a la flota mandada por don Jerónimo de Portugal y Córdoba) que zarpó del puerto andaluz en abril del mismo 1610, y arribó a Cartagena. Desde allí Claver y sus compañeros emprendieron el camino a Santa Fe, remontando el río Magdalena y tomando luego el camino de Honda. Una vez la capital neogranadina se encontró con que no podía seguir los estudios de teología, pues faltaban profesores. Fue asignado al Colegio de la Compañía como coadjutor hasta 1612, cuando la llegada de nuevos religiosos le permitió proseguir dichos estudios. Claver fue enviado luego al noviciado de Tunja para la tercera aprobación, y finalmente al colegio de Cartagena, al que llegó en noviembre de 1615. Se ordenó subdiácono al mes siguiente y en 1616 recibió el diaconado y la ordenación sacerdotal. El nuevo jesuita fue enviado a ayudar al padre Sandoval, que tenía a su cargo la catequización de los negros. Sandoval tuvo que ir a Lima en 1617 y Claver hubo de ocuparse él solo de todo el trabajo. En 1618 se le unió un jesuita italiano, el padre Carlos de Orta, pero murió al año siguiente; afortunadamente, el padre Sandoval regresó a Cartagena en 1620. El 3 de abril de 1622 hizo Claver su profesión. Al pie de la fórmula de los votos consignó de su puño y letra “Petrus Claver, aethiopum semper servus” (“Pedro Claver, esclavo de los negros para siempre”). Era lo que quería ser y lo que siempre fue. El padre Claver ejerció su apostolado con total dedicación, siguiendo el procedimiento empleado por el padre Sandoval. Cuando el gobernador le anunciaba la llegada de un barco negrero, trataba de averiguar de qué región procedía su “carga”, con objeto de buscar los intérpretes adecuados para hablar con los esclavos. Los propietarios de esclavos se negaban a suministrarle intérpretes o ponían muchos obstáculos, motivo por el cual el Colegio de Cartagena terminó comprando un grupo de esclavos-intérpretes oriundos de diversas regiones de África para que ayudaran a Claver. El religioso pasaba con ellos al buque negrero, al que llevaba regalos como naranjas, limones, tabaco, pan o aguardiente. Bajaba a las bodegas y decía a los esclavos que estaba allí para cuidar de que los blancos les trataran bien; les aseguraba que no iban a matarlos, como a menudo creían, y les alentaba a abrazar la fe cristiana, para lo que debían instruirse. Luego preguntaba por los enfermos y los niños nacidos en la travesía, a quienes dedicaba sus cuidados de urgencia. Cuando le impedían subir al buque negrero, hacía lo mismo en los almacenes donde se hacinaban los esclavos. Claver repetía las visitas varios días, y dedicaba después varias horas a la catequesis por medio de los intérpretes. Esta labor solía hacerla en un patio, ante un cuadro de Jesús crucificado, y terminaba con el acto de contrición. Cuando los catecúmenos estaban bien instruidos procedía a bautizarlos, y luego les entregaba unas medallas de plomo que tenían impresos los nombres de Jesús y María. El padre Claver cuidaba también de los negros que vivían usualmente en Cartagena y hasta de los de la provincia, a los que dedicaba una misión anual por Pascua. Manifestaba especial preocupación por los enfermos, lisiados e indigentes, a los que hacía objeto de sus desvelos. Diariamente acudía a los dos hospitales de San Sebastián y San Lázaro, donde consolaba y curaba a los internados. En las cárceles atendía no sólo a los negros, sino también a presos diversos, como los protestantes de la isla de Slanta Catalina, que procedían de capturas realizadas por las naves españolas. El jesuita terminó por ser respetado por las autoridades cartageneras y por los mismos propietarios de esclavos, que temían verle aparecer. Vivía con extrema austeridad, durmiendo en una esterilla y comiendo frugalmente, y dedicado a sus rezos en los ratos libres. En 1651 Cartagena fue azotada por una epidemia. El padre Claver contrajo la enfermedad y le quedó como secuela una parálisis progresiva que, sin embargo, no fue obstáculo para que continuase visitando a los leprosos de San Lázaro, adonde se hacía conducir en mula, e incluso a los pocos esclavos que llegaban. A raíz de la independencia de Portugal en 1640 habían disminuido los barcos negreros, pues dicha nación había detentado el asiento. Se produjo entonces un vacío que duró hasta que volvió a organizarse el negocio de la trata. Pese a ello seguían llegando algunos barcos, como una embarcación con carga de esclavos ararais en 1651. Claver se hizo vestir y, ayudado de un bastón, fue al almacén donde se habían almacenado para la venta. Los instruyó durante varios días y bautizó a no pocos. El 6 de septiembre de 1654 enfermó de gravedad y al día siguiente se le dio la extremaunción. A su muerte, acaecida en la noche del 7 al 8 de septiembre de 1654, numerosos fieles habían ido a visitarle. Tuvo unas solemnes honras fúnebres y fue enterrado en la capilla del Santo Cristo, en la iglesia de la Compañía. El proceso de su beatificación empezó en 1658. En 1747 fue declarado Venerable por Benedicto XIV; fue beatificado en 1851 por Pío IX, y canonizado en 1888 por León XIII. Su fiesta se celebra el 9 de septiembre. Comentario: Pedro Claver era un jesuita que al entrar a estudiar el colegio Jesuita de Belén empieza su vida misionera ya que al graduarse él se une a la compañía de Jesús y empieza a predicar en muchos lugares como en Cartagena en Colombia y se le conoció también como el esclavo de los esclavos ya que el ayudaba a los esclavos mientras predicaba y expandía la palabra de Dios por medio de solidaridad hacia otras personas que necesitaban apoyo. 
5) Wlodimir Ledochowsk   Nació en una finca familiar, Sitzenthal, en Loosdorf, cerca de St. Pölten (Baja Austria), fue hijo del conde Antoni Halka Ledochowski, y descendiente de la familia Ledochowski. Su tío fue Mieczysław Halka Ledochowski, sus hermanas, la santa Úrsula Ledóchowska y la beata Maria Teresia Ledóchowska, y su hermano, Ignacy Kazimierz Ledochowski, un general del ejército polaco. Estudió en el Theresianum en Viena y durante un tiempo fue paje de la Emperatriz. Estudió Derecho en la Universidad de Cracovia y luego comenzó estudios para el sacerdocio secular. Mientras asistía a la Universidad Gregoriana, decidió hacerse jesuita y entró en la Compañía en 1889. Cinco años más tarde fue ordenado sacerdote jesuita. Al principio se dedicó a escribir, pero pronto se hizo Superior de la residencia de los jesuitas en Cracovia y Rector del Colegio. Se convirtió en el Vice-Provincial de Polonia en 1901 y Provincial de Galitzia en 1902. Desde 1906 hasta febrero de 1915 fue auxiliar de los jesuitas en Alemania. Después de la muerte de Franz Xavier Wernz, de 49 años de edad, fue elegido el 26º general de la compañía de Jesús el 11 de febrero de 1915, en la segunda vuelta. A pesar de la convulsión de la Primera Guerra Mundial, la Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial, la Compañía creció durante el período de Ledochowski. Convocó a la 27ª reunión general de los jesuitas que tuvo lugar en Alemania para dar a conocer a la Sociedad con el nuevo código de Derecho canónico (publicado en 1917) y para que las Constituciones jesuitas pudieran estar en consonancia con él. El análisis realizado por Emma Fattorini de los archivos vaticanos del período han mostrado el papel importante que el P. Ledochowski jugó en la redacción de la encíclica contra el comunismo, Divini Redemptoris pero también los obstáculos que puso para que Pío XI no publicara otra encíclica destinada a condenar el antisemitismo.  
6) San Pedro Canisio Holandés de origen, hijo de ricos burgueses de Nimega, Pedro Canisio nació en el año de l52l, cuando, por una parte, Lutero rompía abiertamente con Roma, y por otra parte Ignacio de Loyola, herido en el sitio de Pamplona, rompía definitivamente con el mundo: doble cincidencia providencia, si se observa que el recién nacido iba a ser a la vez el primer hijo de San Ignacio en Alemania y el más temible de los adversarios de Lutero. La muerte prematura de su madre, Egidia, marcó el alma del niño con un recuerdo imborrable: antes de expiar, la piadosa mujer hizo que todos los suyos prometieran permanecer inviolablemente fieles a la religión catótica. Después de una formación literaria y filosófica primeramente en Arnheim, luego en Colonia, desde la edad de l9 años, el joven conquistó el grado de Maestro en Artes. También a esa edad buscaba él su camino hacia el porvenir. Es entonces, que refiere él mismo en sus Confesiones, cuando una voz misteriosa se hizo oíi en su oído: “Ve, enseña el Evangelio a toda creatura”. Resuelto, desde ese momento, a consagrarse al apostolado, comenzó por hacer voto de virginidad. Por condescender con los deseos de su padre, aceptó una canongía en Colonia, pero sin pretender ningún beneficio aclesiástico. Consintió en comenzar sus estudios de derecho, tanto civil como canónico; “pero -----agrega él mismo----- la teología mística y la verdad espiritual tenían mayor atrractivo para mi corazón, pues mi alma encontraba allí más substancia, un alimento más rico”. Bajo la dirección de un sacerdote eminente, Nicolás van Esche, en relación con el prior de los cantujos Juan Laudsperge, el joven clérigo se empeño desde esta época en el camino de la perfección cristiana, entregándose a la vez a importantes trabajos, pues una edición de las obras de Taulero, publicada en ese momento, lleva la firma de Pedro de Nimega, que a pesar de ciertas objeciones, probablemente debe identificarse con Pedro Canisio. Decisivo fue el encuentro, en Maguncia, con uno de los primeros compañeros de San Ignacio, Pedro Fabre. Al concluir los ejercicios espirituales que hizo entonces, Pedro Canisio pisió su admisión en la Compañia de Jesús. Ordenado diácono en l544, y bachiller en teología, se inició en el misterio apostólico simultáneamente bajo diversas formas: cursos en la Universidad, predicaciones, ediciones o traducciones de obras teológicas. Luego, sin esperar más, se vio en lucha con el protestantismo. El arzobispo de Colonia, Hernann de Wied, estaba secretamente comprometido con la herejía. El joven diácono de 24 años fue el encargado de hacer las debidas representaciones ante el emperador Carlos V y su tío Jorge de Austria, arzobispo de Lieja, para obtener la deposición del apóstata y su substitución por un prelado digno. Ordenado sacerdote en l546, el Padre Canisio fue inmediatamente distinguido por el Cardenal Otón-Truchsess, obispo de Augsburgo, que quiso hacerlo su teólogo cuando se le convocó para el Concilio de Trento. Con varios de sus hermanos de religión -----Laínez, Salmerón, Covillon y Le Jay----- a Canisio se le encargó la preparación de las definiciones dogmáticas relativas a los Sacramentos. Transferido muy pronto el Concilio a Bolonia, y luego aplazado, Canisio fue llamado a Roma por San Ignacio de Loyola, impaciente de conocer al brillante súbdito en el que fundaba grandes esperanzas para el porvenir de su Orden en Alemania. Tras de algunas semanas de intimidad con el santo fundador, y luego de algunos meses en Mesina enseñando retórica, el religioso fue admitido a la profesión solemne: hora jubilosa cuyas impresiones él mismo anota: “Ocultando a mi vista, por algunos instantes, el abismo sin fondo de mi indignidad, Vos, oh Jesús, me habéis mostrado cómo en Vos y por Vos se operan tales prodigios de la Gracia que nadie se atreverá jamás a revelar si no quiere exponerse al reproche de presunción. ¿Quién osaría decir, aun teniendo de ello conciencia con toda humildad, que Vos lo habéis escogido como un vaso de elección para llevar vuestro nombre a los pueblos y a los reyes? . . . ¡Y Vos, oh Divino Redentor, me habéis entreabieto vuestro sagrado Corazón, y me habéis permitido hundir en él mis miradas; Vos me habéis invitado a abrevar allí las aguas de la salvación, y ordenado beber en esta sagrada fuente!” El campo de apostolado que la obediencia le asignó era precisamente aquel al que lo llevaban sus secretas aspiraciones: Alemania. A fin de estar en mejores condiciones de luchar contra los predicadores de la Reforma, se armó, en Bolonia, con el grado de doctor en teología. Fue en la Universidad de Ingolstadt donde, a petición del suque de Baviera, se estableció desde luego Canisio con otros dos jesuitas, Le Jay y Salmerón. Muy pronto lo reclama Viena, donde el rey Fernando pensaba hacerlo obispo. Con la autorización de San Ignacio aceptó administrar la diócesis justamente durante un año. En Praga, en seguida, a pesar de la hostilidad de los husitas, fundó un gran colegio. En l556 San Ignacio erigió la provincia de Alemania comprendiendo también los territorios de Austria y de Bohemia; y Canisio fue su primer titular: embrión de provincia que no contaba entonces sino con tres colegios -----Ingolstadt, Viena, Praga-----, pero que bajo el impulso de su provincial adquirió tal ímpetu que al cabo de catorce años, en el mismo territorio, la Compañia comprendía tres provincias, cada una con su noviciado, su escolasticado, muchos colegios y numerosas casas de misioneros. En el coloquio de Worms (l557), donde se enfrentaron protestantes y católicos, canisio supo muy hábilmente poner en contraste las variaciones y las divisiones que caracterizaban al protestantismo con la unidad de doctrina y de disciplina que seguía siendo la regla del catolicismo. Luego, en la Dieta de Augsburgo (l566) se dedicó con gran éxito a resolver el conflicto entre el Papa Pío IV y el Emperador Fernando. Habiendo ido a Roma para la elección del sucesor de San Ignacio a la cabeza de la Compañia de Jesús, Pío IV le confió a Canisio el cargo de Nuncio Apostólico con misión especial de promulgar y de hacer aplicar los decretos del Concilio de Trentoen Alemanis y en los Países Bajos. (l565-l566). Sin embargo, el gobierno le pesaba. Después de trece años de provincialato obtuvo por fin el ser descaargado de él para poder consagrarse más enteramente a la obra que acababa de confiarle el Papa San Píio V: la refutación de las “Centurias de Magdeburgo”, historia eclesiástica tendenciosa y falcsificada, emprendida desde hacía algunos años por los protestantes (l567). Retirado en el colegio de Dillengen, del que su propio hermano Thierry era el rector, dividió su actividad entre los trabajos de la predicación y los de escribir. Trabajo encarnizado, tanto más cuanto el autor, concienzudo y exigente hasta el exceso, se imponía la tarea de encontrar documentos y referencias y luego se dedicaba a recomponer constantemente sus escritos. A pesar de la ayuda que le proporcionaba todo un equipo de colaboradores, su salud se agotaba en tal batalla. Además, su provincial juzgó que el talento y el celo del santo religioso se emplearían más útilmente en publicaciones menos extensas y en lengua alemana que en la composición de obras doctrinales voluminosas y en latín (l578). Y cuando el obispo de Vercelli proyectó la fundación de un colegio en Friburgo, en Suiza, Canisio fue el designado para realizarlo (l580). Una vez organizado el colegio y cedida a otro la dirección, Canisio se entregó a una vida totalmente apostólica: domingos y fiestas, predicaciones en la Catedral de San Nicolás; y entre semana, catecismo a los niños, instrucción a los pobres y a obreros, visitas a enfermos y encarcelados. Abrió escuelas para el pueblo y fundó bajo la invocaión de la Santísima Virgen dos Congregaciones, una de hombres y la otra de mujeres. La irradiación de su santidad hizo todavía más que su acción directa: consagraba a la oración cuatro horas y hasta siete diarias. Más de una vez sus superiores tuvieron que invitarlo a más moderación y prudencia en la penitencia y la mortificación. Gracias a él, el Cantón de Friburgo fue preservado de la herejía y aun hubo en él un verdadero renacimiento de la piedad católica. Clavado por la enfermedad, seguía escribiendo, considerando esto como uno de los mejores instrumentos del apostolado. El superior general de la Compañia, el P. Aquaviva, le pidió que consignara por escrito los frutos de su experiencia, para que los alumnos del Colegio germánico la aprovecharan tanto para su santificación personal como para prepararse al apostolado. Al Prevoste del capítulo de Friburgo el santo religioso le comunicaba sus observaciones sobre el estudio de la teología el joven Francisco de Sales recurrió a sus consejos. El final de Pedro Canisio fue digno de una vida tan bien empleada y marcada con la más auténtica santidad: “Bendecid conmigo al Buen Dios, le escribía a uno de sus hermanos de religión. El visita a un pobre viejo para enseñarle a orar. Una persona hidropesía me impide subir al altar y me retiene en mi cuarto, condenado a ser servido por mis hermanos: ¡heme aquí impotente e inútil en una casa en que el trabajo abunda!” Su agonía se prolongó durante cuatro meses sin cansar su paciencia: “Los dolores aumentaban: Dios sea alabado y los dolores aumentaban: Dios sea alabado y dénsele gracias”. Y cuando el Padre Rector fue a decirle: “Padre Pedro, el tiempo ha pasado; he aquí que Jesús viene a vos”, “Presente”, respondió el moribundo. Expiró esa misma tarde, el 2l de diciembre de l597. Venerado desde luego como un santo, reputación que numerosos milagros obrados junto a su tumba acreditaron rápidamente, no fue, sin embargo, beatificado oficialmente antes de l864, y luego canonizado y puesto en el rango de Doctores de la Iglesia en l925.  


7) Pedro Fabro Dominico español del siglo XIII, nacido en la histórica localidad palentina de Frómista, hacia el año 1175. Su nombre era Pedro González, pero tradicionalmente es conocido como San Telmo. Era sobrino del obispo de Palencia, y fue enviado a estudiar a la reciente y primeriza universidad de Palencia, en donde destacó por su inteligencia preclara Muy joven aún, fue nombrado canónigo de la Catedral de Palencia, y, en seguida, por designación de Roma, elevado a la primera dignidad después del obispo: el Deanato. Un sencillo hecho cambiaría el rumbo de su vida: el ridículo que sintió ante sus convecinos por la caída de su caballo en el barro de una de las plazas de la ciudad, el primer día que paseaba como Deán, ricamente engalanado. Decide entonces cambiar de estado e ingresa en la recién fundada Orden dominicana. Estudió teología y se convirtió en predicador incansable. En la vida religiosa, fue forjándose en un gran espíritu de fe, de oración y de celo apostólico. Fue consejero del rey Fernando III el Santo, y se dedicó en su misión apostólica a ayudar a los necesitados, y de un modo especial en Galicia y Portugal, a la atención de los marineros. La gran devoción a él de los hombres de la mar, con el nombre de San Telmo, se debe a que una tormenta se calmó a la invocación de su nombre. Con fama de santo, murió en Tuy en el año 1246. Su culto inmemorial, como protector de los que corren peligro en el mar, fue confirmado por Benedicto XIV en 1741.


8) Wlodimir Ledochowsk Nació en una finca familiar, Sitzenthal, en Loosdorf, cerca de St. Pölten (Baja Austria), fue hijo del conde Antoni Halka Ledochowski, y descendiente de la familia Ledochowski. Su tío fue Mieczysław Halka Ledochowski, sus hermanas, la santa Úrsula Ledóchowska y la beata Maria Teresia Ledóchowska, y su hermano, Ignacy Kazimierz Ledochowski, un general del ejército polaco. Estudió en el Theresianum en Viena y durante un tiempo fue paje de la Emperatriz. Estudió Derecho en la Universidad de Cracovia y luego comenzó estudios para el sacerdocio secular. Mientras asistía a la Universidad Gregoriana, decidió hacerse jesuita y entró en la Compañía en 1889. Cinco años más tarde fue ordenado sacerdote jesuita. Al principio se dedicó a escribir, pero pronto se hizo Superior de la residencia de los jesuitas en Cracovia y Rector del Colegio. Se convirtió en el Vice-Provincial de Polonia en 1901 y Provincial de Galitzia en 1902. Desde 1906 hasta febrero de 1915 fue auxiliar de los jesuitas en Alemania. Después de la muerte de Franz Xavier Wernz, de 49 años de edad, fue elegido el 26º general de la compañía de Jesús el 11 de febrero de 1915, en la segunda vuelta. A pesar de la convulsión de la Primera Guerra Mundial, la Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial, la Compañía creció durante el período de Ledochowski. Convocó a la 27ª reunión general de los jesuitas que tuvo lugar en Alemania para dar a conocer a la Sociedad con el nuevo código de Derecho canónico (publicado en 1917) y para que las Constituciones jesuitas pudieran estar en consonancia con él. El análisis realizado por Emma Fattorini de los archivos vaticanos del período han mostrado el papel importante que el P. Ledochowski jugó en la redacción de la encíclica contra el comunismo, Divini Redemptoris pero también los obstáculos que puso para que Pío XI no publicara otra encíclica destinada a condenar el antisemitismo.  



9) Baltasar Gracián (Belmonte de Calatayud, España, 1601-Tarazona, id., 1658) Escritor y jesuita español. Hijo de un funcionario, estudió en un colegio jesuita de Calatayud y en la Universidad de Huesca, tras lo cual ingresó, en 1619, en la Compañía de Jesús, probablemente en Tarragona, donde se encontraba el noviciado de la provincia. Se dispone de escasa información sobre su vida entre esta fecha y 1635, año de su ordenación sacerdotal. Se sabe que en 1628 se encontraba en el colegio de Calatayud, donde es presumible que ejerciera como docente, y que su posterior paso por el colegio de Huesca le permitió entrar en contacto con medios muy cultos. Dotado de gran inteligencia y de una elocuencia a la vez rica y límpida, a partir de 1637 se dedicó en exclusiva a la predicación. En Zaragoza fue nombrado confesor del virrey Nochera, a quien acompañó a Madrid, donde residió por dos veces entre 1640 y 1641, por lo que frecuentó la corte y trabó amistad con el célebre poeta Hurtado de Mendoza. Después de una corta estancia en Navarra con el virrey, ambos se dirigieron a Cataluña para sofocar la revuelta. En 1642, Nochera murió violentamente como consecuencia de su oposición a la sañuda política represiva que había adoptado la Corona en Cataluña. Ejerció por un tiempo de secretario de Felipe IV, tras lo cual fue enviado, en parte como castigo de la Compañía por sus ideas y escritos, a combatir contra los franceses en el sitio de Lérida (1646). Su obra más conocida, El criticón, apareció en 1651, firmada por García de Marlones, anagrama de su nombre, disimulo que no pudo evitar el agravamiento de sus problemas con la Compañía de Jesús, que le aplicó una sanción ejemplar. Poco después se trasladó a Zaragoza como catedrático de la Universidad. En 1650 había empezado a preparar El comulgatorio (publicado con su apellido en 1655), obra que comprende cincuenta meditaciones para la comunión y constituye una valiosa muestra de oratoria culterana. De carácter orgulloso e impetuoso, y, sobre todo, mucho más hombre de letras que religioso, Gracián optó por desobedecer de nuevo a la jerarquía y publicó las partes segunda y tercera de El criticón (1653 y 1657), bajo el nombre de su hermano, Lorenzo de Gracián. El segundo volumen no le costó más que una nueva amonestación de los jesuitas, pero la aparición del tercero supuso su caída en desgracia. El padre Piquer, rector del colegio jesuita de Zaragoza, lo castigó a ayuno de pan y agua, y, tras desposeerle de la cátedra que ostentaba, lo desterró a Graus. El mismo año de 1657 apareció la Crítica de reflexión, violento alegato contra él, firmado por un autor levantino. Parcialmente rehabilitado, se instaló en Tarazona, donde su petición de ingresar en una orden monástica le fue denegada por la Compañía. La concepción pesimista sobre el hombre y el mundo predomina en sus primeras obras: El héroe (1637), El discreto (1646) y Oráculo manual y arte de prudencia (1647), en las que da consejos sobre la mejor manera de triunfar. El estilo de Gracián, considerado el mejor ejemplo del conceptismo, se recrea en los juegos de palabras y los dobles sentidos. En Agudeza y arte de ingenio (1648) teorizó acerca del valor del ingenio y sobre los «conceptos», que él entiende como el establecimiento de relaciones insospechadas entre objetos aparentemente dispares; el libro se convirtió en el código de la vida literaria española del siglo XVII y ejerció una duradera influencia a través de pensadores como La Rochefoucauld o Schopenhauer. La obra cumbre de su producción literaria, El criticón, emprende el ambicioso proyecto de ofrecer una amplia visión alegórica de la vida humana en forma novelada. Sus dos protagonistas, Andrenio y Critilo, son símbolos, respectivamente, de la Naturaleza y la Cultura, de los impulsos espontáneos y de la reflexión prudente. Como Gracián parte del supuesto barroco de que la Naturaleza es imperfecta, Critilo es quien salva a Andrenio de las asechanzas del mundo y lo conduce luego a la isla de la Inmortalidad, a través de una serie de lugares alegóricos.  

10) José María Rubio Nació en Dalias (Almería) el día 22 de julio de 1864, el mayor de doce hermanos del matrimonio compuesto por don Francisco y doña Mercedes, campesinos. En su pueblo natal acudió a la escuela y, después de las clases, le gustaba leer las vida de santos. Con diez años, un canónigo, José Maria, tío suyo. Le hizo estudiar en un instituto de bachillerato en la capital, pero, viendo que tenia vocacional sacerdotal, lo envió al seminario diocesano de Almería. En 1879 se traslado al seminario de San Cecilio, en Granada, donde terminó los estudios filosóficos, los cuatro de teología y dos de derecho canónico, siendo alumno aventajado de otro canónigo, don Joaquín Torres, quien al pasar a Madrid, se llevo consigo a José Maria. En 1887 lo inscribió en el seminario diocesano de la inmaculada y de San Dámaso, de Madrid, y el 24 de septiembre de ese mismo año fue ordenado sacerdote, incardinado en esa diócesis. Celebro su primera misa el 8 de octubre siguiente en la entonces catedral de San Isidro, en la capilla de la Virgen del Buen Consejo. El 1 de noviembre de 1887 fue nombrado coadjuntador de la parroquia de Chichón (Madrid), donde en tan solo nueve meses empezó a tener fama de santo, mientras continuaba haciendo dos cursos facultativos de teología en el seminario, para obtener en 1888 la licenciatura en derecho canónico en 1897. Antes del amanecer ya estaba en la iglesia orando, y dedicaba a todos por su austeridad y pobreza y por su caridad con los mas pobres. El 24 de septiembre de 1889 fue nombrado administrador parroquial de Estremera (Madrid); en su apostolado parroquial se caracterizo por compaginar su vida de oración con la atención a los pobres y enfermos, dando cuanto tenia a los demás. Se dejo convencer para presentarse a unas oposiciones de canónigo en Madrid, que perdio, y a consecuencia de eso fue nombrado profesor de latín, filosofía y teología pastoral en el seminario madrileño; por ellos tuvo que trasladarse a la capital de España. Fue nombrado notario del obispado y mas tarde encargado del registro. Se le designo tambien capellan de las religiosas. Bernardas y como tal permanecio durante trece años; este cargo le facilitaba entregarse a un intenso apostolado, que seria la característica principal de toda su vida: atendia a muchísimas personas en el sacramento de la penitencia como excelente confesor, daba catequesis a niños pobres, en las «escuelas dominicales»; se dedicaba a los «traperos», «parados» y a los llamados «golfos», y a la vez dirigia continuamente tandas de ejercicios espituales. Pasaba muchas noches en oración. Quienes le veían celebrar la misa decían: «Parece que habla con alguien». En 1904 peregrino a Roma y Tierra Santa. Le impresionaron para siempre las dos visitas. De Roma, el Papa Pio X, las catacumbas y la tumbas de Pedro y Pablo; y de Jerusalén, el santo Sepulcro y el Calvario. Siendo sacerdote diocesano secular, tenia una gran admiración por la Compañía de Jesús. SE llamaba a si mismo «jesuita de afición». Toda su vida se centraba en «cumplir la voluntad de Dios». Y el 11 de octubre de 1906 entro en el noviciado de la compañía de Jesús de Granada. Hizo sus primeros votos el 12 de Octubre de 1908 y permaneció en Granada para profundizar en sus estudios teológicos, mientras a la ves predicaba misiones populares y daba tandas de ejercicios espirituales. Seguidamente trabajo en obras apostólicas en la residencia jesuítica de Sevilla, dirigiendo en la congregación mariana de jóvenes, la comunión reparadora de los militares, el apostolado de la oración, las conferencias de San Vicente de Paúl y una escuela vespertina para obreros. Atendía también el confesionario de la Iglesia y la predicación a los miembros de la Adoración nocturna. Era exigente, pero siempre con dulzura. «Se cazan mas moscas con una gota de miel que un barril de vinagre», decía con gracia. En Septiembre de ese año se traslado a Manresa (Barcelona) para su «tercer año de probación», desde donde fue destinado a Madrid, y allí, el 2 de Febrero de 1917, emitió sus votos perpetuos. Desde entonces Madrid fue el campo de su intenso apostolado. Vivía en la residencia jesuítica de la calle de la Flor y era buscado y requerido por todo el mundo. Con sotana y roquete, la cabeza ligeramente inclinada, irradiaba tal bondad que atraía sobrenaturalmente. Aunque no hablaba retóricamente como otros oradores, sin embargo sus sermones atraían a la gente y convencía por que vivía lo que predicaba. Repetía como lema:«Haced lo que Dios quiere y querer lo que Dios hace». Organizo, predico y atendió distintas personalmente distintas misiones populares en distintos pueblos de Madrid. Espiritualmente vivió una temporada de escrúpulos, pero eso no le impidió dedicarse a promover obras de apostolado que hicieran bien a cuanta más gente pudiera; por eso su fama de santidad era extraordinaria en todo el Madrid de su Tiempo. Intentó fundar «los discípulos de San Juan» e incluso fue sometido a un registro policial acusado de crear un nuevo instituto religioso. Cuando los superiores le prohibieron esta actividad, lo acepto de buen grado diciendo «No busco mas que cumplir la santísima voluntad de Dios» Cuando le removieron de su cargo de director de las Marías de los Sagrarios y de un boletín del Sagrado Corazón, manifesto: «Debo ser tonto. No me cuesta obedecer» Mientras tanto, había que permanecer mas de tres horas en la fila para confesarse con él. Atendía a todos por igual y por orden, lo mismo a marquesas que a pobres. Gozaba de dones místicos e incluso de gracias sobrenaturales especiales, como el don de profecía y de videncia. Comprobaron que estuvo a la vez y a la misma hora en el confesionario y visitando a un enfermo. Escuchaba íntimamente llamadas de socorro a distancia y hasta el aviso de una madre fallecida, para ir a atender a su hijo incrédulo. Un día de carnaval, un grupo de comparsa le había preparado una trampa, llamándolo a una casa de citas para administrar los últimos sacramentos a un enfermo. Uno de ellos, en la cama se hacia pasar por moribundo para que se rieran los demás y dar ocasión de fotografiar al Padre Rubio en esta ocasión «ridícula». Al entrar el en el prostibulo con intención de atender al enfermo, descubrió que estaba realmente muerto. Fue tal la impresión que dos miembros de aquel grupo se hicieron religiosos poco después. Ejercio su ministerio pastoral con una dimensión social en los suburbios más pobres de Madrid, singularmente en el de La Ventilla, donde los movimientos revolucionarios soliviantaban a la clase obrera. Fundó escuelas, predicó la palabra de Dios y fue formador de muchos cristianos que morirían mártires durante la persecución religiosa en España. Su testamento, en una charla a las «Marias de los sagrarios», fue exhortar a realizar una «liga secreta» de personas que vivieran la perfección en medio del mundo, promoviendo asi una forma de consagración que mas tarde se concretaria en los intitutos seculares. Presintió su propia muerte y hasta llego a despedirse de sus amigos. A finales de Abril de 1929, viéndolo debilitado por su intenso trabajo y por su dolorosa enfermedad, los superiores lo trasladaron al noviado de Aranjuez para que reposara. Alli, después de haber rot, por humildad, sus apuntes espirituales, decia: «Señor, si quieres llevarme ahora, estoy preparado». «abandono, abandono». Tres dias después de su llegada, el 2 de mayo de 1929, en una angina de pecho. En todo Madrid no se hablaba de otra cosa: «Ha muerto un santo». Miles de personas asistieron a su funeral inhumados en el cementerio del mismo noviciado, pero en 1953 fueron trasladados a la nueva Casa de Profesa de Madrid Fue beatificado en Roma por el Papa Juan Pablo II el 6 de Octubre de 1985. Sus reliquias estan en el claustro de una casa de la Compañía, junto a la Iglesia parroquial del Sagrado Corazon y San Francisco de Borja, y su memoria liturgica se viene celebrando el 4 de Mayo.  


Bibliografía: 
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/i/ignacio.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/San_Ignacio_de_Loyola 
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/d/danielou.htm
http://www.infobiografias.com/biografia/28573/beato-Pedro-Fabro.html
http://www.labiografia.com/ver_biografia.php?id=8734
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http://www.es.catholic.net/sacerdotes/564/2763/articulo.php?id=25373
http://es.wikipedia.org/wiki/Wlodimir_Ledochowski
http://www.congregacionmariana.org.co/index.php?option=com_content&view=article&id=156&Itemid=42  
http://multimedios.org/docs/d001484/
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/s/suarez_francisco.htm
http://www.articuloz.com/biografias-articulos/francisco-suarez-2096999.html
http://es.catholic.net/santoral/articulo.php?id=23359